martes, 11 de diciembre de 2012

cuento sin moraleja

un dia como cualquier otro, agarre una hoja de cuaderno a cuadritos y sin ningun motivo en especial empece a pintar sus cuadraditos, lo hice a conciencia y dedicandolo mucho tiempo al principio pintaba una linea de cuadraditos por medio en forma hrizontal y otra vertical, bajaba de renglon y hacia lo mismo, y trataba de combinar colores para poder utilizarlos todo por ejemplo rojo, verde, negro, rosa y los siguientes que podia utilizar era amarillo marron o quizas azul. En un tiempo pense en pintar muchas hojas y guardarlas, ya les encontraria utilidad. Despues quise terminarla para hacerle con ello un cartel a mi madre, y depsues no tenia nada en mente pero yo seguia de vez en cuando agarrando mi hoja y pintando una tira de colores. Despues de muchos meses vi que ya me faltaba poco. Habia fallecido mi mama y mi vida tenia menos sentido del que podria haber tenido antes pero pintar esa hoja se habia vuelto algo importante para mi,porque me distraia de mis problemas, por un rato olvidaba lo desgraciada que era mi vida. Una mañana tomando mates con mi hermanas, les enseñe mi "hoja de cuadritos" y les comente que lo hacia sin ningun motivo pero que me encantaba por una extraña razon pintar esos cuadritos, entonces la mayor de ellas me dijo que era como si yo pintara mi vida, pasara lo que pasara yo siempre le daba un color a un cuadrito siempre tenia como seguirlo. Eso me hizo pensar mucho y me pregunte que pasaria el dia que la terminara ya que me faltaba tan poco, comence a observar esa hoja y era como si describiera mi estado de animo en cada momento en que lo pinte, los primeros eran colores vivos y era una epoca en la que me iba bien, despues habian altibajos, algo se habia desmoronado en mi vida, y los ultimos reflejaban tristeza, soledad, habian colores opacos, frios. Quede fascinada viendo como trabajaba mi subconsciente. A la noche siguiente cuando volvi a pintar se cayo sobre mi hoja un vaso de agua y arruino mi trabajo, los colores se mezclaron y se borraban las lineas que dividian un cuadradito de otro. senti mucha impotencia ya que faltaba practicamente nada para terminarlo, solo unos dias, unas horas mas dedicacion. Ahora yo me pregunto que moraleja me deberia haber dejado ese papel al que tanto tiempo habia dedicado....

No hay comentarios:

Publicar un comentario